domingo, 23 de septiembre de 2012

LOS LLAMADOS "AMIGOS"


El hecho de que los adolescentes se vuelvan tan susceptibles respecto a sus pequeños defectos, se debe a que sus “amigos” los han molestado con bromas al respecto, avergonzándolos durante los primeros años. Desgraciadamente, con frecuencia, los niños y las niñas son muy crueles entre sí, y se lanzan insultos, en extremo hirientes, que vienen a ser como dardos envenenados. Por ejemplo, conozco el caso de una niña de tercer grado que en la escuela recibió una cara de otra niña que aparentemente la detestaba. Aquella no le había hecho daño alguno a la autora de la nota; no obstante  la misma leía así:
Horrible Janet,
Eres la chica más odiosa del mundo. Espero que te mueras pronto, pero claro, supongo que esto no puede ser. Te voy a dar algunas sugerencias:
1 Vete a jugar en la carretera, donde pasan muchos autos.
 2 Córtate la garganta con un cuchillo
3 Tómate un veneno
4 Emborráchate
5 Clávate un cuchillo
Por favor has pronto algunas de estas cosas, grandísima estúpida. Todos te odiamos mucho. Estoy orando, Señor,  por favor haz que Janet se muera. Necesitamos que entre aire fresco. Me oíste Señor, espero que lo hayas hecho, porque si no, todos vamos a morirnos aquí con ella. Lo ves,  Janet, no todos somos malos.
                                                   De  Wanda Jackson
¿Alguna vez recibiste una nota como esta? O más importante aún, ¿has escrito, en alguna ocasión, una carta igual a ésta? Se puede ofender a los jóvenes muy fácilmente y esta clase de mensaje hiere profundamente, y su efecto dura mucho tiempo. Tal vez Janet aun lo recuerde después de grande. 

lunes, 17 de septiembre de 2012

EL DAÑO QUE INFLIGE LA NATURALEZA


Los jóvenes de hoy en la sociedad norteamericana creen que existen tres requisitos fundamentales que, según ellos, son indispensables para que puedan sentirse satisfechos consigo mismos. La primera exigencia, y que mayor tiene es, ser atractivo físicamente. ¿Sabías que, aproximadamente un 80 por ciento de los adolescentes en nuestra sociedad no están conformes con su apariencia física? ¡Nada menos que un ochenta por ciento!


Si les preguntas a diez adolescentes qué es lo que más contribuye a que se sientan infelices, ocho te dirán que no están conformes con algún rasgo o característica de su cuerpo. Creen que son feos(as), y piensan en ese problema la mayor parte del tiempo. También creen que no le simpatizan al sexo opuesto. Las chicas piensan que son demasiado altas, y los chicos creen que son muy pequeños, o demasiado gordos o muy delgados; o se preocupan por los granos que tienen en la cara o por las pecas de la nariz o por su color de pelo o porque creen que tienen los pies demasiado grandes o porque no le gusta como tienen las uñas de las manos.
No importa lo insignificante que sea el problema; el mismo puede crear gran preocupación y depresión. La mayoría de los adolescentes se examinan a sí mismos cuidadosamente frente al espejo, para determinar cuánto daño les ha hecho la madre naturaleza, y no les gusta lo que ven.
Como nadie es perfecto, por lo general encuentran algún detalle en su persona que les desagrada. Entonces empiezan a preocuparse y a inquietarse por eso, y desean no tener ese defecto en particular. ¿Te imaginas lo que es uno sentirse deprimido e infeliz por algún tan absurdo como es el tener la nariz una fracción de pulgada más larga de lo que según tú debería ser?